Uno de los éxitos de las redes sociales, además indudablemente de la capacidad de comunicación, es el sentido del humor.
Me sorprende que haya jóvenes que en su código de comunicación ya les sobren muchas palabras, que tienen el móvil lleno de stickers que utilizan para contestar, para dar las gracias, para invitar a salir, para quedar a hacer deporte…
Algunos de estos stickers son increíblemente graciosos, muy elaborados, con su imagen y disfrazados de mil cosas, con caras imposibles, minivídeos de imágenes que se repiten en bucle… y casi todas tienen en común una cosa: son o intentan ser graciosas, bonitas y atractivas.
Lo mismo ocurre con las redes sociales. Una de las ventajas indudables de Instagram y por supuesto de Tik Tok es la facilidad para hacer vídeos o para editar imágenes o historias sin tener que utilizar ninguna otra aplicación que la propia red social. Para lo que hasta hacer algún tiempo necesitábamos un editor de video, ahora se hace en dos minutos tirado en el sofá y sin pensar demasiado. Las posibilidades son muchísimas.
En Tik Tok hay un sinfín de vídeos graciosos. De hecho, es una red social que se alimenta de ellos. Los memes ya están pasando de moda. Hace falta movimiento.
Estos vídeos se visualizan en Instagram y algunos de ellos generan tendencias, modas, de corta duración en la mayoría de los casos, pero sirven para entretener y divertir.
Por eso vemos canciones que triunfan más, mini bailes, retos imposibles, juegos… que intentamos hacer todos. Y por eso, tenemos a adolescentes horas y horas mirando el móvil, no siempre están jugando, ni viendo las publicaciones en redes de sus amigos, la mayor parte del tiempo están consumiendo vídeos hechos por personas que no conocen y de vez en cuando visualizan alguno con el que parten de risa y muchas veces les hace tanta gracia porque son situaciones cotidianas, con las que se ven reflejados, porque tratan sin vergüenza problemas propios de los jóvenes: que si tu madre te riñe, que si quieres salir y tienes hora de vuelta, que si el dinero, que si los trabajos del instituto, que si los compañeros, que si aprendiendo a conducir…
Si hemos escrito este blog es porque pensamos que si no puedes luchar contra el enemigo es mejor unirse a él. No decimos que os pongáis a publicar historias o a hacer Tik Tok, NO. Lo que decimos es que incorporéis a vuestra rutina diaria el sentido del humor, sobre todo si tenéis hijos/as adolescentes.
Un poco de sentido del humor, por favor.